A partir del 1 de junio entrará en vigor la nueva factura de la luz para los aproximadamente 10,7 millones de usuarios de la tarifa regulada (PVPC).
Esta nueva normativa para los peajes o tarifas de acceso de la luz, tiene como objetivo fomentar un consumo de energía más eficiente.
Las tarifas de acceso o peajes siempre han formado parte de tu factura de la luz. Actualmente pueden suponer más del 40% de lo que acabas pagando en tu factura. Este es un concepto que está regulado por el Gobierno.
Los cambios en los peajes obedecen a un intento de fomentar la eficiencia energética. En concreto, apuntan en las siguientes direcciones:
- Se penaliza a las potencias altas y los consumos en horas punta.
- Se fomentan los consumos en horas valle.
¿En qué consisten los cambios?
- Antes de la nueva normativa: los peajes tenían un único precio para la energía consumida, sin importar la hora del día, a no ser que se hubiese contratado un peaje con discriminación horaria (en este caso, había 2 o 3 franjas horarias con diferente precio). En la potencia contratada, los peajes tenían el mismo precio para todas las horas del día.
- Con la nueva normativa: los peajes y cargos regulados tendrán 2 franjas horarias con diferente precio para la potencia y 3 franjas horarias para el consumo.
Los nuevos tres tramos horarios
Antes del cambio, todas las franjas tenían un precio único salvo que se aplicara una tarifa con discriminación horaria. A partir de junio habrá tres tramos horarios para todos los usuarios domésticos (menos de 15kW) con PVPC.
- El periodo punta con el coste más alto, será el comprendido entre las 10 y las 14 horas y entre las 18 y 22 horas.
- El coste llano o intermedio será entre las 8 y las 10 horas, las 14 y las 18 horas y entre las 22 y 24 horas.
- La tarifa valle, la más barata, será entre la medianoche y las 8 de la mañana, así como durante todo el fin de semana y festivo.
En cuanto a los horarios elegidos, indican que han apostado por franjas que sirvan para verano e invierno. Si bien, algunas de las elecciones de franja podrían cambiar en el futuro. La normativa está planeada para seis años y los tramos podrán ser revisados al cabo de tres años.
¿Qué significa que puedes contratar 2 potencias diferentes?
La potencia contratada se mide en kW y es la potencia máxima de electricidad de la que puedes disponer en el mismo momento. En términos cotidianos, es el número máximo de aparatos que puedes tener funcionando a la vez.
Hasta ahora, la norma solo permitía tener una única potencia. Por ello, cada usuario se veía obligado a contratar una potencia que cubriese sus necesidades máximas, aunque estuviesen concentradas en una franja horaria muy concreta. Con la nueva regulación puedes tener una potencia mayor y otra menor según tus necesidades.
Este cambio permitirá por ejemplo solicitar una potencia mayor en horarios puntuales para el uso de bombas de calor o la recarga doméstica de coches eléctricos.
Con la nueva factura se han reducido de 14 a 8 horas la franja más barata y aquí es donde un incremento de la potencia puede servir para compensar el menor tiempo disponible en la franja económica. En la potencia que tienes contratada, por defecto se te mantendrá la misma potencia contratada para todas las horas, pero podrás elegir tener dos potencias diferentes, una más diurna y otra más pensada para las noches y los fines de semana.
Ventajas y beneficios de este cambio en la factura
La respuesta a esta cuestión va a depender de lo eficiente que consigas ser en tu consumo de energía y como te adaptes a los nuevos tramos horarios.
La nueva normativa rebaja el coste de la parte fija de la factura (potencia contratada) y da más peso a la parte variable (energía consumida). De esta manera, si evitas consumir en horas punta tendrás más ahorro en tu factura.
Y es que, habrá que ser muy consciente de los tramos en los que utilizamos nuestros aparatos eléctricos; habrá que modificar nuestros hábitos para poder ver una rebaja en nuestra factura de la luz.
Con la presentación de esta nueva factura eléctrica ya han surgido las primeras estimaciones sobre cómo será el impacto en función del usuario. Según OCU, un hogar medio con PVPC, 4,6kW de potencia y un consumo de 3.500 kWh no vería un gran impacto.
Aquellos que realicen el consumo durante las horas valle serán los más beneficiados. Especialmente cobra importancia el fin de semana, donde, por ejemplo, poner una lavadora un domingo sería hasta dos veces y media más barato que hacerlo un día entre semana al mediodía.
Además, habrá un nuevo formato de factura con PVPC, con menos páginas e información de las potencias máximas demandadas. Esta nueva factura incluirá un código QR para poder acceder a un comparador de ofertas de energía de la web de la CNMC.
Posibles desventajas
Este cambio, como ocurre con la gran mayoría, supondrá un periodo de transición complejo al principio, pero beneficioso en el largo plazo, según los expertos. Para el consumidor, al principio va a ser un poco caos, y es que, la gran mayoría de los consumidores están con tarifas de un solo tramo, y ahora vamos a pasar a contar con tres.
Va a haber un periodo transitorio de confusión y dudas, que podrá durar unos meses o incluso un año, hasta que la situación se normalice y nos adaptemos.
Igual que con este nuevo tipo de factura, aquellos que se adapten a los tramos y las potencias según sus necesidades, aquellos hogares que no tengan en cuenta estos factores, podrán ver incrementadas notablemente sus facturas.
Esto ocurrirá por la razón que hemos mencionado antes: este nuevo sistema traslada en gran medida su peso a la parte variable de la factura, la que depende del consumo de cada hogar y disminuye el peso del término fijo.
Ritmo de vida
Lo que podemos sacar en claro de todo este cambio, es que, a largo plazo, la parte beneficiosa seria contar con más poder de decisión sobre la factura de la luz. Sin embargo, este beneficio tardaremos en verlo, ya que, son varios los factores a tener en cuenta, y cambiar de hábitos en nuestra vida cotidiana no es fácil.
La parte mas negativa es que no siempre nos será posible adaptarnos, ya que también dependerá de los tipos de horarios de trabajo que tengamos y el ritmo de vida.
No será igual para una persona que trabaje fuera de casa, que por ejemplo, alguien que teletrabaje, algo muy común derivado de la pandemia. Toda persona que tenga que estar en su casa trabajando, consumirá mucho más si su jornada laboral coincide con los periodos de hora punta.
Un cambio de esta envergadura debería haber ido asociado de una gran campaña de información, cosa que no ha existido.
Cuando el consumidor asuma todos estos cambios, los nuevos horarios servirán para que los hábitos sean más eficientes, pero durante esta transición surgirán probablemente bastantes confusiones y problemas derivados.