Isabel Díaz Ayuso ha presentado un nuevo «cheque bebé», que consistirá en una ayuda de 14.500 euros por cada hijo para las madres menores de 30 años que lleven más de diez años empadronadas en la Comunidad de Madrid.
Cada mujer recibirá 500 euros al mes desde el quinto mes de embarazo hasta que el niño cumpla dos años. La ayuda, además, será compatible con el puesto de trabajo de las beneficiarias siempre y cuando éstas cobren menos de 30.000 euros al año. La ayuda que propone la presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid se concederá por cada hijo, es decir, será acumulativa, según ha especificado.
Una medida fuera de la estadística actual
Las mujeres madrileñas tienen a su primer hijo, de media, a los 32 años. Si bien es una medida que busca incentivar la natalidad, los datos demuestran que las beneficiarias de esa ayuda serán una mínima parte de las mujeres embarazadas de la comunidad: tan solo el 21,78% de los niños que nacieron en 2019 tenían madres de menos de 30 años.
El grueso de los embarazos en la Comunidad de Madrid se producen en la treintena, donde el porcentaje subía hasta el 66% ese mismo año, el último que registra el Instituto de Estadística de la región.
Este nuevo «cheque bebé» comenzará a aplicarse en 2022 si se aprueban unos nuevos presupuestos. Según los cálculos del Partido Popular, podrán beneficiarse del mismo entre 12.000 y 14.000 personas. Según los cálculos del Gobierno regional en funciones, tendría un impacto presupuestario de 250 millones de euros anuales
Unos requisitos, criticados por la portavoz de Más Madrid en la Asamblea, Mónica García, que ha trasladado que «sería bueno» si contase con las madres pero se trata de una medida que solo afectará al 2%.
Prioridad en el plan de vivienda
Además, Ayuso ha anunciado que todas las embarazadas de hasta 35 años tendrán prioridad en el Plan Vive de ayuda a la vivienda en la Comunidad, y también se desarrollará una bolsa de trabajo específica para todas las madres, sin límite de edad, que estén en situación de desempleo, que podrán optar a planes de formación y soporte educativo si deciden volver a estudiar.
